sábado, 18 de agosto de 2007

Lo siento

¿Qué no hubiese dado por estar contigo?
Pero me siento ajena, lejos, dispersa,
Mis ojos esconden su brillo, mi risa disfraza mi tristeza.

¡¿Qué no hubiese dado por tenerte cerca?!
Y así contar frente a las olas las infinitas estrellas.
Yo hubiese dado mi noche, mi día, mi cama, mi almohada, mi canción y mi soñar…
Pero me dejaste marchar sin pedirme que me quedara,
Y ahora estoy aquí, desvelada
Culpándome por mi miedo y odiándote por tu orgullo
Porque mi abrazo pudo ser tuyo,
Y hubiera podidido acompañarte a volar.

No hay comentarios: