Quisiera esta noche quedarme tranquila
tal vez callada
tal vez disfrazada de suspiro.
Esta noche quiero pintarte con mis ojos la llama azul que ves en mi mirada
Esta noche quiero escribirte hasta mañana los versos escondidos en las lunas de Júpiter
Esta noche las estrellas las esculpieron mis manos imaginando un puente entre tus labios y mis labios
Esta noche escondí poesía en mi vientre
para no delatar lo que se quiere, pero no se puede.
Esta noche, como siempre, fuiste ajeno pero te deseé mío… te deseé cerca.
Pero no eres sueño, te veo aquí, te siento…
No eres fantasía…
Eres una palabra oculta,
duende encantado: mitad desdicha, mitad poema.
jueves, 23 de agosto de 2007
sábado, 18 de agosto de 2007
Para vencer
Nuestro corazón tiene que ser más grande que nuestras manos;
nuestra voluntad debe ser más fuerte que nuestro cuerpo,
Nuestro deseo, más ferviente que nuestro llanto,
Nuestra fé más poderosa que nuestro miedo.
nuestra voluntad debe ser más fuerte que nuestro cuerpo,
Nuestro deseo, más ferviente que nuestro llanto,
Nuestra fé más poderosa que nuestro miedo.
Lo que nunca fue
Nunca me cantaste la canción que me escribiste,
Nunca me cumpliste tu promesa de bailar,
Y siempre llegaré a extrañar
La tarde en la playa de que tanto hablamos.
Seguiré inmersa en este smogg por extrañar tus tibios labios,
Y seguiré sin tus abrazos, que buscaba sin cesar.
Pero de nada vale hablar con quien de voluntad de escuchar carece;
Yo convertiré mis pérdidas en creces
mientras te trato de entender o de olvidar.
Algún día volveremos a hablar…
y probablemente a pensar el uno en el otro.
Nunca me cumpliste tu promesa de bailar,
Y siempre llegaré a extrañar
La tarde en la playa de que tanto hablamos.
Seguiré inmersa en este smogg por extrañar tus tibios labios,
Y seguiré sin tus abrazos, que buscaba sin cesar.
Pero de nada vale hablar con quien de voluntad de escuchar carece;
Yo convertiré mis pérdidas en creces
mientras te trato de entender o de olvidar.
Algún día volveremos a hablar…
y probablemente a pensar el uno en el otro.
Once again
Once again I have you near me and my skin can’t stop shivering when I feel your breath.
Once again your eyes, with nothing else but passion, undress me inside and out.
Once again, I’m defenseless in your arms… nesting in your chest, hoping for you not to let go, and praying so this moment never ends.
It’s you and me, together, once again…
Once again your eyes, with nothing else but passion, undress me inside and out.
Once again, I’m defenseless in your arms… nesting in your chest, hoping for you not to let go, and praying so this moment never ends.
It’s you and me, together, once again…
Odd...
Tanta lira no cabe en una sola poesía.
Tantos eventos no se garban en un trozo de papel.
Ni tantos detalles casuales, tantas sorpresas, tantas sonrisas, tantos sentimientos escondidos que aunque no se muestran… se pueden ver.
Tanta sorpresa al conocerte y al buscarte,
Que al encontrarte me costaba entender
Que también como nacen a veces las flores silvestres,
Los amores eternos florecen también.
Tantos eventos no se garban en un trozo de papel.
Ni tantos detalles casuales, tantas sorpresas, tantas sonrisas, tantos sentimientos escondidos que aunque no se muestran… se pueden ver.
Tanta sorpresa al conocerte y al buscarte,
Que al encontrarte me costaba entender
Que también como nacen a veces las flores silvestres,
Los amores eternos florecen también.
Nomada
Tengo el ánima rota por enamorarme sola de un príncipe viajero
Creo que es árbol seco cuyas raíces no se adhieren al suelo.
Y aún así le entrego todo: lo que sueño, lo que escribo y lo que espero.
Yo le sueño de día y de noche,
Pero mi amante es tardío para las caricias y pronto para el reproche;
Yo le pienso y le escribo,
Pero mi amante es nómada indeciso.
Yo le amo, sí, le amo locamente…
Pero para mi amante soy una más, una amiga indiferente.
Entonces, ¿cómo quedarme con él?
Me martiriza la incertidumbre.
Yo puedo quererle, puedo esperarle, puedo empujarlo a soñar, acompañarlo a volar por las nubes cada tarde
Si mi amante fuera menos cobarde y se atreviese a amar.
Creo que es árbol seco cuyas raíces no se adhieren al suelo.
Y aún así le entrego todo: lo que sueño, lo que escribo y lo que espero.
Yo le sueño de día y de noche,
Pero mi amante es tardío para las caricias y pronto para el reproche;
Yo le pienso y le escribo,
Pero mi amante es nómada indeciso.
Yo le amo, sí, le amo locamente…
Pero para mi amante soy una más, una amiga indiferente.
Entonces, ¿cómo quedarme con él?
Me martiriza la incertidumbre.
Yo puedo quererle, puedo esperarle, puedo empujarlo a soñar, acompañarlo a volar por las nubes cada tarde
Si mi amante fuera menos cobarde y se atreviese a amar.
Poeta sin poemas
Tengo tanto que no escribo y tanto miedo a equivocarme
que no sé si rescatarme de este desorden vacío.
Ya ni el poema es lo que era,
Ya ni lloro ni sonrío.
Ya no hay sol, ni hay luna nueva
Perdí la agilidad de mis dedos con la claridad de mis ideas.
Sólo me deleito en lo que leo,
(Ya que es poco lo que escribo)
Porque así no pongo mi alma en juego…
Es otro el que con sus secretos expuestos
Delata lo que llevo escondido.
que no sé si rescatarme de este desorden vacío.
Ya ni el poema es lo que era,
Ya ni lloro ni sonrío.
Ya no hay sol, ni hay luna nueva
Perdí la agilidad de mis dedos con la claridad de mis ideas.
Sólo me deleito en lo que leo,
(Ya que es poco lo que escribo)
Porque así no pongo mi alma en juego…
Es otro el que con sus secretos expuestos
Delata lo que llevo escondido.
Lo siento
¿Qué no hubiese dado por estar contigo?
Pero me siento ajena, lejos, dispersa,
Mis ojos esconden su brillo, mi risa disfraza mi tristeza.
¡¿Qué no hubiese dado por tenerte cerca?!
Y así contar frente a las olas las infinitas estrellas.
Yo hubiese dado mi noche, mi día, mi cama, mi almohada, mi canción y mi soñar…
Pero me dejaste marchar sin pedirme que me quedara,
Y ahora estoy aquí, desvelada
Culpándome por mi miedo y odiándote por tu orgullo
Porque mi abrazo pudo ser tuyo,
Y hubiera podidido acompañarte a volar.
Pero me siento ajena, lejos, dispersa,
Mis ojos esconden su brillo, mi risa disfraza mi tristeza.
¡¿Qué no hubiese dado por tenerte cerca?!
Y así contar frente a las olas las infinitas estrellas.
Yo hubiese dado mi noche, mi día, mi cama, mi almohada, mi canción y mi soñar…
Pero me dejaste marchar sin pedirme que me quedara,
Y ahora estoy aquí, desvelada
Culpándome por mi miedo y odiándote por tu orgullo
Porque mi abrazo pudo ser tuyo,
Y hubiera podidido acompañarte a volar.
viernes, 17 de agosto de 2007
En el instante que quieras
Mis deseos
van haciendo eco con
el espacio vacío
de tus manos ausentes,
de tus manos ausentes,
entre mi piel sin tus huellas.
En un océano agitado
En un barco sin destinos,
En un barco sin destinos,
con sus velas rotas,
mi corazón
va buscando un príncipe perdido:
una luz, para mi luz,
un silencio para mis labios...
un beso para mi cuello,
una luz, para mi luz,
un silencio para mis labios...
un beso para mi cuello,
un suspiro para mi ombligo.
Yo soy apenas
Yo soy apenas
un susurro inquieto.
Soy como esa silueta perdida
en una huella de miedo.
Soy como esa silueta perdida
en una huella de miedo.
Mis manos se pierden
escarbando
entre caricias añejas,
y mis piernas
y mis piernas
cansadas
caminan hacia atrás.
...
Y otra vez esta sed de amor
esta locura palpable en mis ojos,
esta semiluz ardiendo en mis venas...
me quema y se esfuma,
me prende y se escapa...
y me voy quedando sola,
con un aura de lejanía,
esta locura palpable en mis ojos,
esta semiluz ardiendo en mis venas...
me quema y se esfuma,
me prende y se escapa...
y me voy quedando sola,
con un aura de lejanía,
con una añoranza de ti.
Entonces te busco
en otros besos,
en otro brazos,
en otras palabras menos ciertas;
Entonces te busco
en otros besos,
en otro brazos,
en otras palabras menos ciertas;
en otros sueños duermo contigo
y respiro otro aroma que me recuerda a ti.
En ese lecho te espero
con mis manos abiertas,
con mis pies descalzos,
con tu nombre grabado
en los minutos que pasan;
con mis medias rotas,
divago entre almacenes de botellas rotas
y respiro otro aroma que me recuerda a ti.
En ese lecho te espero
con mis manos abiertas,
con mis pies descalzos,
con tu nombre grabado
en los minutos que pasan;
con mis medias rotas,
divago entre almacenes de botellas rotas
contando los anocheceres
ansiando que llegues, y alientes con tu aliento a mi boca.
Con mis zapatos en tus huellas,
con la puerta abierta,
con una fuente que grita
todas mis desquiciadas ganas de que aparezcas.
ansiando que llegues, y alientes con tu aliento a mi boca.
Con mis zapatos en tus huellas,
con la puerta abierta,
con una fuente que grita
todas mis desquiciadas ganas de que aparezcas.
Aquí te espero inerte,
sedienta,
sedienta,
desnuda,
esperando el amor
en el instante que quieras...
esperando el amor
en el instante que quieras...
Mariposa - K.R.A.O.S
( Gracias amigo)
Te he extrañado hoy como al viento, como al aire,
Como suplicio de misericordia he extrañado oír tu voz
Para no conformarme con imaginarte
Para tener en mi día una caricia, un poema y un sol.
Para adornar mi pared con flores he decidido sembrar tus versos en mí,
Para llenar de cielo mis sueños, he decidido volar junto a ti,
Para no encarcelarme entre hierbas y troncos,
Trataré de no bloquear los ojos que el alma me dio
Para pedir por ti en mis oraciones y buscar tu pecho en momentos de dolor.
¿Me dejas escribirte poemas y buscar tu voz en las noches que te quiera?
¿Me dejas pedir perdón cuando te diga palabras que hieran?
¿Me dejas reír contigo y saber que puedo abrazarte cuando la soledad me duela?
Déjame tenerte cerca, mi duendecillo escondido.
Llévame a volar donde las aves vuelan
¡Vamos a mimarnos juntos, vamos a contar estrellas!
Porque Hoy es un regalo,
Mañana no es una promesa.
Como suplicio de misericordia he extrañado oír tu voz
Para no conformarme con imaginarte
Para tener en mi día una caricia, un poema y un sol.
Para adornar mi pared con flores he decidido sembrar tus versos en mí,
Para llenar de cielo mis sueños, he decidido volar junto a ti,
Para no encarcelarme entre hierbas y troncos,
Trataré de no bloquear los ojos que el alma me dio
Para pedir por ti en mis oraciones y buscar tu pecho en momentos de dolor.
¿Me dejas escribirte poemas y buscar tu voz en las noches que te quiera?
¿Me dejas pedir perdón cuando te diga palabras que hieran?
¿Me dejas reír contigo y saber que puedo abrazarte cuando la soledad me duela?
Déjame tenerte cerca, mi duendecillo escondido.
Llévame a volar donde las aves vuelan
¡Vamos a mimarnos juntos, vamos a contar estrellas!
Porque Hoy es un regalo,
Mañana no es una promesa.
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